Archivo de noviembre de 2019

Lectura diaria de la Biblia

sábado, 9 de noviembre de 2019

9 de noviembre 2019 – sábado. Leed la Biblia, es la mejor forma de conocer a Dios y al hombre.

Papa Francisco: Con el término madre nos referimos no tanto al edificio sagrado de la Basílica de Letrán, catedral de Roma, sino a la obra del Espíritu Santo que se manifiesta en este edificio, fructificando mediante el ministerio del obispo de Roma en todas las comunidades que permanecen en la unidad con la Iglesia que él preside. Jesús, al hablar del templo, revela una verdad sorprendente: que el templo de Dios no es solamente el edificio hecho con ladrillos, sino que es su cuerpo, hecho de piedras vivas (9-11-2014).

Se acercaba la Pascua de los judíos y Jesús subió a Jerusalén. Y encontró en el templo a los vendedores de bueyes, ovejas y palomas, y a los cambistas sentados; y, haciendo un azote de cordeles, los echó a todos del templo, ovejas y bueyes; y a los cambistas les esparció las monedas y les volcó las mesas; y a los que vendían palomas les dijo: Quitad esto de aquí; no convirtáis en un mercado la casa de mi Padre. Sus discípulos se acordaron de lo que está escrito: El celo de tu casa me devora. Entonces intervinieron los judíos y le preguntaron: ¿Qué signos nos muestras para obrar así?. Jesús contestó: Destruid este templo y en tres días lo levantaré. Los judíos replicaron: Cuarenta y seis años ha costado construir este templo, ¿y tú lo vas a levantar en tres días?. Pero él hablaba del templo de su cuerpo. Y, cuando resucitó de entre los muertos, los discípulos se acordaron de que lo había dicho, y creyeron a la escritura y a la palabra que había dicho Jesús.

Ezequiel 47, 1-2.8-9.12; Salmo 45, 2-9 . Juan 2, 13-22

Lectura diaria de la Biblia

viernes, 8 de noviembre de 2019

8 de noviembre 2019 – viernes. Leed la Biblia, es la mejor forma de conocer a Dios y al hombre.

Papa Francisco: Dios nos ha mandado llevar el pan a casa con nuestro trabajo honesto. Pero este administrador daba de comer a sus hijos pan sucio. Se comienza con un pequeño soborno, pero es como la droga. Después viene el otro y el otro: y se termina con la enfermedad de la adicción a los sobornos, un pecado muy grave porque va contra la dignidad. Esa dignidad con la que somos ungidos con el trabajo. (8-11-2013).

Decía Jesús a sus discípulos: Un hombre rico tenía un administrador, a quien acusaron ante él de derrochar sus bienes. Entonces lo llamó y le dijo: “¿Qué es eso que estoy oyendo de ti? Dame cuenta de tu administración, porque en adelante no podrás seguir administrando”. El administrador se puso a decir para sí: “¿Qué voy a hacer, pues mi señor me quita la administración? Para cavar no tengo fuerzas; mendigar me da vergüenza. Ya sé lo que voy a hacer para que, cuando me echen de la administración, encuentre quien me reciba en su casa”. Fue llamando uno a uno a los deudores de su amo y dijo al primero: “¿Cuánto debes a mi amo?”. Éste respondió: “Cien barriles de aceite”. Él le dijo: “Toma tu recibo; aprisa, siéntate y escribe cincuenta”. Luego dijo a otro: “Y tú, ¿cuánto debes?”. Él respondió: “Cien fanegas de trigo”. Le dice: “Toma tu recibo y escribe ochenta”. Y el amo alabó al administrador injusto, porque había actuado con astucia. Ciertamente, los hijos de este mundo son más astutos con su propia gente que los hijos de la luz.

Romanos 15, 14-21; Salmo 97, 1-4 . Lucas 16, 1-8

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jueves, 7 de noviembre de 2019

7 de noviembre 2019 – jueves. Leed la Biblia, es la mejor forma de conocer a Dios y al hombre.

Papa Francisco: En estas parábolas nos impresiona la alegría de Dios, la alegría que Él siente cuando encuentra de nuevo al pecador y le perdona. ¡Sí, la alegría de Dios es perdonar! Aquí tenemos la síntesis de todo el Evangelio. Cada uno de nosotros es esa oveja perdida, esa moneda perdida; cada uno de nosotros es ese hijo que ha derrochado la propia libertad siguiendo ídolos falsos, espejismos de felicidad, y ha perdido todo. Pero Dios no nos olvida, el Padre no nos abandona nunca. Es un Padre paciente, nos espera siempre (15-9-2013).

Solían acercarse a Jesús todos los publicanos y los pecadores a escucharlo. Y los fariseos y los escribas murmuraban diciendo: Ése acoge a los pecadores y come con ellos. Jesús les dijo esta parábola: Quien de vosotros que tiene cien ovejas y pierde una de ellas, ¿no deja las noventa y nueve en el campo y va tras la descarriada, hasta que la encuentra? Y, cuando la encuentra, se la carga sobre los hombros, muy contento; y, al llegar a casa, reúne a los amigos y a los vecinos y les dice: “¡Alegraos conmigo!, he encontrado la oveja que se me había perdido”. Os digo que así también habrá más alegría en el cielo por un solo pecador que se convierta que por noventa y nueve justos que no necesitan convertirse. O qué mujer que tiene diez monedas y se le pierde una, ¿no enciende una lámpara y barre la casa y busca con cuidado, hasta que la encuentra? Y, cuando la encuentra, reúne a las amigas y a las vecinas y les dice: “¡Alegraos conmigo!, he encontrado la moneda que se me había perdido”. Os digo que la misma alegría tendrán los ángeles de Dios por un solo pecador que se convierta.

Romanos 14, 7-12; Salmo 26, 4.13-14 . Lucas 15, 1-10

Lectura diaria de la Biblia

miércoles, 6 de noviembre de 2019

6 de noviembre 2019 – miércoles. Leed la Biblia, es la mejor forma de conocer a Dios y al hombre.

Papa Francisco: El que quiere a su padre o a su madre más que a mí, no es digno de mí… (Mt 10, 37). Naturalmente, con esto Jesús no quiere cancelar el cuarto mandamiento. Cuando Jesús afirma el primado de la fe en Dios, no encuentra una comparación más significativa que los afectos familiares. Y, por otro lado, estos mismos vínculos familiares, en el seno de la experiencia de la fe y del amor de Dios, se transforman, se llenan de un sentido más grande y llegan a ser capaces de ir más allá de sí mismos (2-9-2015).

Mucha gente acompañaba a Jesús; él se volvió y les dijo: Si alguno viene a mí y no pospone a su padre y a su madre, a su mujer y a sus hijos, a sus hermanos y a sus hermanas, e incluso a sí mismo, no puede ser discípulo mío. Quien no carga con su cruz y viene en pos de mí, no puede ser discípulo mío. Así, ¿quién de vosotros, si quiere construir una torre, no se sienta primero a calcular los gastos, a ver si tiene para terminarla? No sea que, si echa los cimientos y no puede acabarla, se pongan a burlarse de él los que miran, diciendo: “Este hombre empezó a construir y no puede acabar”. ¿O qué rey, si va a dar la batalla a otro rey, no se sienta primero a deliberar si con diez mil hombres podrá salir al paso del que le ataca con veinte mil? Y si no, cuando el otro está todavía lejos, envía legados para pedir condiciones de paz. Así, pues, todo aquel de entre vosotros que no renuncia a todos sus bienes no puede ser discípulo mío.

Romanos 13, 8-10; Salmo 111, 1-2.4-5.9 . Lucas 14, 25-33

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martes, 5 de noviembre de 2019

5 de noviembre 2019 – martes. Leed la Biblia, es la mejor forma de conocer a Dios y al hombre.

Papa Francisco: Somos invitados gratuitamente, por pura gracia de Dios, puro amor del Padre. Fue Jesús, con su sangre, que nos abrió esta posibilidad. Invitación a una fiesta. Es una gracia, una invitación; no se puede comprar este derecho. Hay que formar comunidad, compartir todo lo que tenemos –las virtudes, las cualidades que el Señor nos ha dado- en el servicio de unos por otros. Requiere estar disponibles para lo que el Señor nos pide y no pedir caminos especiales para entrar en el pueblo de Dios que camina hacia la eternidad (5-11-2013).

Uno de los comensales dijo a Jesús: ¡Bienaventurado el que coma en el reino de Dios!. Jesús le contestó: Un hombre daba un gran banquete y convidó a mucha gente; a la hora del banquete mandó a su criado a avisar a los convidados: “Venid, que ya está preparado”. Pero todos a una empezaron a excusarse. El primero le dijo: “He comprado un campo y necesito ir a verlo. Dispénsame, por favor”. Otro dijo: “He comprado cinco yuntas de bueyes y voy a probarlas. Dispénsame, por favor”. Otro dijo: “Me acabo de casar y, por ello, no puedo ir”. El criado volvió a contárselo a su señor. Entonces el dueño de casa, indignado, dijo a su criado: “Sal a prisa a las plazas y calles de la ciudad y tráete aquí a los pobres, a los lisiados, a los ciegos y a los cojos”. El criado dijo: “Señor, se ha hecho lo que mandaste, y todavía queda sitio”. Entonces el amo le dijo: “Sal por los caminos y senderos e insísteles hasta que entren y se me llene mi casa”. Y os digo que ninguno de aquellos convidados probará mi banquete.

Romanos 12, 5-16a; Salmo 130, 1-3 . Lucas 14, 15-24

Lectura diaria de la Biblia

lunes, 4 de noviembre de 2019

4 de noviembre 2019 – lunes. Leed la Biblia, es la mejor forma de conocer a Dios y al hombre.

Papa Francisco: ¿Quiénes son los destinatarios privilegiados del anuncio evangélico? La respuesta es clara y la encontramos en el mismo Evangelio: los pobres, los pequeños, los enfermos, aquellos que a menudo son despreciados y olvidados, aquellos que no tienen como pagarte. La evangelización, dirigida preferentemente a ellos, es signo del Reino que Jesús ha venido a traer: Existe un vínculo inseparable entre nuestra fe y los pobres. Nunca los dejemos solos (Evangelii gaudium, 48) (24-5-2015).

Jesús dijo a uno de los principales fariseos que lo habían invitado: Cuando des una comida o una cena, no invites a tus amigos, ni a tus hermanos, ni a tus parientes, ni a los vecinos ricos; porque corresponderán invitándote, y quedarás pagado. Cuando des un banquete, invita a pobres, lisiados, cojos y ciegos; y serás bienaventurado, porque no pueden pagarte; te pagarán en la resurrección los justos.

Romanos 11, 29-36; Salmo 68, 30-31.33-34.36-37 . Lucas 14, 12-14

Lectura diaria de la Biblia

domingo, 3 de noviembre de 2019

3 de noviembre 2019 – domingo. Leed la Biblia, es la mejor forma de conocer a Dios y al hombre.

Papa Francisco: En Jericó tiene lugar uno de los acontecimientos más gozosos narrados por san Lucas: La conversión de Zaqueo. Siendo pequeño de estatura, Zaqueo se trepa a un árbol, para poder ver al Maestro que pasa. Este gesto exterior, un poco ridículo, expresa sin embargo el acto interior del hombre que busca tener un contacto con Jesús. Jesús, cuando se acerca a ese árbol, lo llama por su nombre: Zaqueo, date prisa y baja, porque es necesario que hoy me quede en tu casa (Lc 19, 5). Su nombre tiene un hermoso significado lleno de alusiones: Zaqueo, en efecto, quiere decir Dios recuerda. Y Jesús va a la casa de Zaqueo, suscitando las críticas: ¿Cómo? Con todas las buenas personas que hay en la ciudad, ¿va a estar precisamente con ese publicano? Jesús dice: Hoy ha sido la salvación de esta casa, pues también este es hijo de Abrahán. En la casa de Zaqueo, desde ese día, entró la alegría, entró la paz, entró la salvación, entró Jesús. Y yo te digo a ti: si tienes un peso en tu conciencia, si tienes vergüenza por tantas cosas que has cometido, no te asustes. Piensa que alguien te espera porque nunca dejó de recordarte: es tu Padre, es Dios quien te espera. Trepa, como hizo Zaqueo, sube al árbol del deseo de ser perdonado; yo te aseguro que no quedarás decepcionado. Jesús es misericordioso y jamás se cansa de perdonar (30-10-2016).

Sabiduría 11, 22-12, 2: Señor, el mundo entero es ante ti como un grano en la balanza, como gota de rocío mañanero sobre la tierra. Pero te compadeces de todos, porque todo lo puedes y pasas por alto los pecados de los hombres, para que se arrepientan. Amas a todos los seres y no aborreces nada de lo que hiciste; pues, si odiaras algo, no la habrías creado. ¿Cómo subsistiría algo si tú no lo quisieras? O ¿cómo se conservaría, si tú no lo hubieras llamado? Pero tú eres indulgente con todas las cosas, porque son tuyas, Señor, amigo de la vida. Tu soplo incorruptible está en todas ellas. Por eso, corriges poco a poco a los que caen, los reprendes y les recuerdas su pecado, para que, apartándose del mal crean en ti, Señor.

Salmo 144, 1-2.8-11: Bendeciré tu nombre por siempre, Dios mío, mi rey.

2Tesalonicenses 1, 11-2, 2: Oramos continuamente por vosotros, para que nuestro Dios os haga dignos de la vocación y con su poder lleve a término todo propósito de hacer el bien y la tarea de la fe. De este modo el nombre de nuestro Señor Jesús será glorificado en vosotros y vosotros en él, según la gracia de nuestro Dios y del Señor Jesucristo. A propósito de la venida de nuestro Señor Jesucristo y de nuestra reunión con él, os rogamos hermanos, que no perdáis fácilmente la cabeza ni os alarméis por alguna revelación, rumor o supuesta carta nuestra, como si el día del Señor estuviera encima.

Lucas 19, 1-10: Entró Jesús en Jericó e iba atravesando la ciudad. En esto, un hombre llamado Zaqueo, jefe de publicanos y rico, trataba de ver quien era Jesús, pero no lo lograba a causa del gentío, porque era pequeño de estatura. Corriendo más adelante, se subió a un sicomoro, para verlo, porque tenía que pasar por allí. Jesús, al llegar a aquel sitio, levantó los ojos y le dijo: Zaqueo, date prisa y baja, porque es necesario que hoy me quede en tu casa. Él se dio prisa en bajar, y lo recibió muy contento. Al ver esto, todos murmuraban diciendo: Ha entrado a hospedarse en casa de un pecador. Pero Zaqueo, de pie, dijo al Señor: Mira, Señor, la mitad de mis bienes se la doy a los pobres; y si he defraudado a alguno, le restituyo cuatro veces más. Jesús le dijo: Hoy ha sido la salvación de esta casa, pues también éste es hijo de Abrahán. Porque el Hijo del hombre ha venido a buscar y a salvar lo que estaba perdido.

Lectura diaria de la Biblia

sábado, 2 de noviembre de 2019

2 de noviembre 2019 – sábado. Leed la Biblia, es la mejor forma de conocer a Dios y al hombre.

CONMEMORACIÓN DE TODOS LOS FIELES DIFUNTOS

Papa Francisco: Palabras de Job: Yo sé que mi Defensor está vivo y que él, el último, se levantará sobre el polvo. Es bello pensar que la muerte del cuerpo es como un sueño del que Jesús mismo nos despertará. La tradición de la Iglesia ha exhortado siempre a rezar por los fieles difuntos, ofreciendo por ellos la celebración eucarística, que es la mejor ayuda espiritual que podemos ofrecer a las almas, particularmente a las más abandonadas. El recuerdo de los difuntos, el cuidado de los sepulcros y los sufragios son el testimonio de la confiada esperanza radicada en la certeza de que la muerte no es la última palabra sobre la suerte humana, porque el hombre está destinado a una vida sin límites que tiene su raíz y su fin en Dios (2-11-2017: Cementerio de guerra en Roma).

Dijo Jesús a sus discípulos: No se turbe vuestro corazón; creed en Dios y creed también en mí. En la casa de mi Padre hay muchas moradas; si no fuera así, os lo habría dicho, porque me voy a prepararos un lugar. Cuando vaya y os prepare un lugar, volveré y os llevaré conmigo, para que donde estoy yo estéis también vosotros. Y a donde yo voy, ya sabéis el camino. Tomás le dice: Señor, no sabemos adónde vas, ¿cómo podemos saber el camino?. Jesús le responde: Yo soy el camino y la verdad y la vida. Nadie va al Padre, sino por mí.

Lamentaciones 3, 17-26; Salmo 129, 1-8; Romanos 6, 3-9 . Juan 14, 1-6

Lectura diaria de la Biblia

viernes, 1 de noviembre de 2019

31 de octubre 2019 – viernes. Leed la Biblia, es la mejor forma de conocer a Dios y al hombre.

Papa Francisco: En el Evangelio de san Lucas (13, 34-35) se lee la lamentación de Jesús sobre la ciudad: Jerusalén, Jerusalén, que matas a los profetas y apedreas a los que se te envían. Es una imagen de ternura: “Cuántas veces he querido reunir a tus hijos como la gallina reúne a sus polluelos bajo las alas, y no habéis querido”. Como si dijese: Cuántas veces he querido hacerte sentir esta ternura, este amor, como la gallina con sus polluelos, y vosotros lo habéis rechazado… El más malo, el más blasfemo es amado por Dios con una ternura de padre, de papá. Dios, el poderoso, el creador, lo puede hacer todo; sin embargo Dios llora y en esas lágrimas está todo su amor (29-10-2015).

Se acercaron unos fariseos a decir a Jesús: Sal y marcha de aquí, porque Herodes quiere matarte. Jesús les dijo: Id a decirle a ese zorro: “Mira, yo arrojo demonios y realizo curaciones hoy y mañana, y al tercer día mi obra quedará consumada”. Pero es necesario que camine hoy y mañana y pasado, porque no cabe que un profeta muera fuera de Jerusalén”. ¡Jerusalén, Jerusalén, que matas a los profetas y apedreas a los que se te envían! Cuántas veces he querido reunir a tus hijos, como la gallina reúne a sus pollitos bajo las alas, y no habéis querido. Mirad, vuestra casa va a ser abandonada. Os digo que no me veréis hasta el día que digáis: “Bendito el que viene en nombre del Señor”.

Romanos 8, 31b-39; Salmo 108, 21-22.26-27.30-31 . Lucas 13, 31-35