Lectura diaria de la Biblia

2 de enero 2019 – miércoles. Leed la Biblia, es la mejor forma de conocer a Dios y al hombre.

Papa Francisco: Esta es la vocación de Juan: ser testigo. Juan era la lámpara, no la luz, la llama que indicaba donde estaba la luz, la lámpara que indica donde está la luz, da testimonio de la luz; era la voz. Juan dice de sí: “Yo soy la voz que grita en el desierto”. Él era la voz que da testimonio de la Palabra, indica la Palabra, el Verbo de Dios. Él solo es voz. Predicador de penitencia y el que bautiza indicando a quien verdaderamente bautiza en Espíritu Santo. Juan es lo provisional que indica a Jesús, que es lo definitivo (16-12-2016).

Este fue el testimonio de Juan, cuando los judíos enviaron desde Jerusalén sacerdotes y levitas a que le preguntaran: ¿Tú quién eres?. Él confesó y no negó; confesó: Yo no soy el Mesías. Le preguntaron: ¿Entonces, qué? ¿Eres tú Elías?. Él dijo: No lo soy. ¿Eres tú el profeta?. Respondió: No. Y le dijeron: ¿Quién eres? Para que podamos dar una respuesta a los que nos han enviado, ¿qué dices de ti mismo? Él contestó: Yo soy la voz que grita en el desierto: “Allanad el camino del Señor”, como dijo el profeta Isaías. Entre los enviados había fariseos y le preguntaron: Entonces, ¿por qué bautizas tú si no eres el Mesías, ni Elías, ni el profeta?. Juan le respondió: Yo bautizo con agua; en medio de vosotros hay uno que no conocéis, el que viene detrás de mí, y al que no soy digno de desatar la correa de la sandalia. Esto pasaba en Betania, en la otra orilla del Jordán, donde Juan estaba Juan bautizando.

1Juan 2, 22-28; Salmo 97, 1-4 . Juan 1, 19-28

Los comentarios están cerrados