Lectura diaria de la Biblia

20 de septiembre 2018 – jueves. Leed la Biblia, es la mejor forma de conocer a Dios y al hombre.

Papa Francisco: El Evangelio de hoy nos abre un camino de esperanza y de consuelo. Es bueno percibir sobre nosotros la mirada compasiva de Jesús, así como la percibió la mujer pecadora en la casa del fariseo. Esta mujer encontró verdaderamente al Señor. En el silencio, le abrió su corazón; en el dolor, le mostró el arrepentimiento por sus pecados; con su llanto, hizo un llamamiento a la bondad divina para recibir el perdón. Para ella no habrá ningún juicio sino el que viene de Dios, y este es el juicio de la misericordia (13-3-2015).

Un fariseo rogaba a Jesús que fuera a comer con él y, entrando en casa del fariseo, se recostó a la mesa. En esto una mujer de la ciudad, una pecadora, se puso a regarle los pies con sus lágrimas, se los enjugaba con sus cabellos, los cubría de besos y se los ungía con el perfume. Al ver esto, el fariseo que lo había invitado se dijo: si este fuera profeta, sabría quien y qué es esta mujer que lo está tocando, pues es una pecadora. Jesús respondió y le dijo: Simón, tengo algo que decirte. Él respondió: Dímelo, Maestro. Jesús le dijo: Un prestamista tenía dos deudores; uno le debía quinientos denarios y el otro cincuenta. Como no tenían con que pagar, los perdonó a los dos. ¿Cuál de los dos le mostrará más amor? Simón contestó: Supongo que aquel a quien le perdonó más. Jesús le dijo: Has juzgado rectamente. Y, volviéndose a la mujer, dijo a Simón: ¿Ves a esta mujer? He entrado en tu casa y no me has dado agua para los pies; ella, en cambio me ha regado los pies con sus lágrimas y me los ha enjugado con sus cabellos. Tú no me diste el beso de paz; ella, en cambio, desde que entró, no ha dejado de besarme los pies. Tú no me ungiste la cabeza con ungüento; ella, en cambio, me ha ungido los pies con perfume. Por eso te digo: Sus muchos pecados han quedado perdonados porque ha amado mucho; pero al que poco se le perdona, ama poco. Y a ella le dijo: Han quedado perdonados tus pecados. Tu fe te ha salvado, vete en paz.

1Corintios 15, 1-11; Salmo 117, 1-2.16-17.28 . Lucas 7, 36-50

Los comentarios están cerrados