Lectura diaria de la Biblia

26 de marzo 2012 – Lunes

Mundo: Dios se hace hombre para que todo hombre pueda ser hijo de Dios: ¿ofrece el mundo algo más importante y liberador?.

Fe: Hágase en mí según tu palabra: es la actitud de María, la mejor cristiana.

SOLEMNIDAD DE LA ANUNCIACIÓN DEL SEÑOR

Is 7, 7, 10-14; 8, 10: Mirad: la virgen está en cinta.

Sal 39, 7-10: Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad.

Hb 10, 4-10: Está escrito: “Aquí estoy, oh Dios, para hacer tu voluntad”.

Lucas 1, 26-38: A los seis meses, el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea llamada Nazaret, a una virgen desposada con un hombre llamado José, de la estirpe de David: la virgen se llamaba María. El ángel, entrando en su presencia dijo: Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo. Ella se turbó ante estas palabras y se preguntaba qué saludo era aquel. El ángel le dijo: No temas, María, porque has encontrado gracia ante Dios. Concebirás en tu vientre y darás a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús. Será grande, se llamará Hijo del Altísimo, el Señor Dios le dará el trono de David, su padre, reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin. Y María dijo al ángel: ¿Cómo será eso, pues no conozco a varón?. El ángel le contestó: El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y la fuerza del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso el Santo que va a nacer se llamará hijo de Dios. Ahí tienes a tu pariente Isabel, que, a pesar de su vejez, ha concebido un hijo, y ya está de seis meses la que llamaban estéril, porque para Dios no hay nada imposible. María contestó: Aquí está la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra. Y la dejó el ángel.

Los comentarios están cerrados